La muerte de Omar Souto, histórico Gerente de Selecciones Nacionales de Argentina durante más de 30 años, generó profundo pesar en el futbol argentino. Reconocido por su capacidad organizativa y por su rol decisivo en la estructura de la AFA, Souto también fue una figura clave para que Lionel Messi terminara vistiendo la camiseta albiceleste.

 

El dirigente, recordado por varias generaciones de futbolistas, fue considerado una referencia dentro del ámbito de las selecciones juveniles y mayores. Su trabajo tuvo un capítulo determinante en 2003, cuando asumió la misión de gestionar el contacto con el joven rosarino que despuntaba en el FC Barcelona.

 

Tras conocerse la noticia de su fallecimiento, Messi le dedicó un mensaje especial en redes sociales. “ Siempre estuviste presente y fuiste la persona que abrió el camino para que la AFA se fijara en mí”, escribió el capitán de Argentina.

 

Luego añadió: “ Un ser humano enorme, imposible de olvidar para todos los que tuvimos el privilegio de pasar por la Selección. Tu huella queda para siempre. Nunca te vamos a olvidar, Omar. Que descanses en paz”.

 

Souto relató en distintas ocasiones la búsqueda que inició para ubicar a Messi: confundido por el nombre, recurrió a una guía telefónica para localizar a la familia y, finalmente, llegar a Jorge Messi. Ese primer contacto derivó en el histórico proceso que aseguró la presencia del delantero en la selección.

 

De igual manera, Javier Mascherano, en la conferencia de prensa posterior a la victoria 4 a 0 del Inter Miami sobre Cincinnati por la Semifinal de los Play Off de la Conferencia Este de la MLS, le dedicó el triunfo a Juan Cruz Souto, hijo de Omar y utilero de las Garzas.

 

“ Quiero dedicarle esta victoria a Juan Cruz Souto, que es nuestro utilero. Es un amigo que conozco hace más de 15 años. Lamentablemente, ha fallecido su padre, Omar, que fue la persona que, básicamente, me hizo conocer la Selección Argentina”, declaró el Jefecito, a quien se lo notó afectado por la noticia.

Un error fue suficiente para que el América viera desvanecerse su sueño de acabar con la maldición de las finales y que Tigres levantara su séptimo título de la Liga MX Femenil después de una memorable remontada en el partido de Ida. 

Las Amazonas ahora sí salieron conectadas, jugaron por nota, sin cometer erroresy, lo más importante, con la mira puesta en no desaprovechar las oportunidades que les brindaran las Águilas y así lo hicieron.

Tras una presión constante, a los 20 minutos del encuentro, en una jugada a medio terreno, Annie Karich devolvió mal la de gajos a Annia Mejía, quien no pudo alcanzarla, situación que aprovechó Diana Ordoñez para salir a velocidad, enfrentar a Sandra Paños y fusilarla para el primero de Tigres.

 

El gol fue un golpe psicológico mortal para las azulcrema, se perdieron en la cancha, no encontraban cómo salir de ese bajón producido por un grave error, si por momentos lograban jugarle palmo a palmo a Tigres, ahora lucían vulnerables y descontroladas.

 

Antes de los 60 minutos el América se complicó las cosas cuando, en una jugada que llevaba poco peligro, Nancy Antonio pateó en la cara a Jennifer Hermoso de forma circunstancial, pero tras la revisión en el VAR se decretó la tarjeta roja para dejar a las suyas con una menos.

 

Esto mermó aún más las aspiraciones de las capitalinos, se había ido a las regaderas la jugadora que hasta ese momento era el motor del equipo, las azulcremas se quedaron sin alguien que las liderara en el terreno de juego y se notaban perdidas y sin idea de cómo atacar.

 

Las Amazonas, con toda la experiencia que las caracteriza, simplemente esperaron atrás, bajaron la intensidad y dejaron a las azulcremas hacer el trabajo difícil, cansarlas y esperar a que se consumiera el tiempo.

El marcador no se movió más, Tigres se impuso al América 1(4)-(3)0 y obtuvo su séptimo título de la Liga MX Femenil en este Torneo Apertura 2025.